lunes, 23 de julio de 2007

Y los Colegios...¿Sirven para educar a los jóvenes de Hoy?



Ps. Elisabeth Anriquez

Presidenta Directorio Colegio San Francisco de Paine.

Directora Corporación Cultural Al Sur del Maipo


Juan Pablo llega a la oficina de Raúl - psicólogo escolar- con la mirada baja y un aire de desconsuelo. Le pide un momento para conversar porque tiene algo que contarle. Ya unos días atrás, a raíz de haber participado en una sesión de orientación donde el tema era el sentido de vida, habían tenido mayor proximidad. Consuelo, su profesora jefe, ha estado atenta a los estados de ánimo de Juan Pablo pues conoce el problema en su familia. El padre está gravemente enfermo desde hace meses, lo cual ocupa una buena parte del tiempo de su mamá, quien además está obligada trabajar durante toda la jornada. Fue ella quien se acercó a Consuelo a sabiendas de que en el colegio la ayudarán, pues el abatimiento de su hijo la preocupa, pero se siente cansada y con pocos recursos para apoyarlo.

Con sus 16 años Juan Pablo sufre la soledad en su propio hogar. Sin embargo, cuenta con su colegio y las redes de apoyo; sus compañeros; Consuelo; David el profesor de Inglés; Patricia en la biblioteca y bueno.... Raúl que siempre conversa con los alumnos y en especial, sabe escuchar. Juan Pablo está salvado.

Hoy día, en el ritmo acelerado de nuestras vidas, cientos de adolescentes de nuestro país, en todos los estratos sociales, se sienten tan solos y perdidos y sin espacios que los contengan, que finalmente optan por caminos perniciosos para sí mismos o para los demás. Altos índices de drogadicción, alcoholismo y delincuencia (en algunos casos sólo por llamar la atención), son reflejo de esta soledad. Las tasas de agresión hacia sí mismos y de suicidio de los adolescentes han aumentado en un porcentaje alarmante en los últimos años.

¿Y qué están haciendo efectivamente al respecto los colegios? La respuesta es indignante: poco o nada. En lugar de enfatizar en mejores modos de convivencia, de comunicación, de resolución de conflictos, están demasiado ocupados en llenar de conocimientos los cerebros de sus alumnos. Deben mostrar resultados en cifras.

Nuestro Juan Pablo seguirá adelante y podrá ser feliz a pesar de las circunstancias, porque el colegio donde ha pasado un tercio de su vida, tiene por definición privilegiar el ámbito emocional, pues sabe que sólo los alumnos psicológicamente equilibrados podrán llegar a ser creativos y originales., serán capaces de trabajar en equipo, lograr un pensamiento de calidad y obtener aprendizajes que realmente les serán útiles para la vida.

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