Ideas Al Sur del Maipo

¿Es posible tener menos cárceles?

Elisabeth Anriquez Ebner

Psicóloga Universidad de Chile

Vice Presidenta Corporación Al Sur del Maipo

Los sucesos dramáticos recién ocurridos en el penal de San Miguel nos enfrentan nuevamente a una de las manifestaciones crueles que tiene en nuestra sociedad la situación de marginalidad de una parte importante de nuestra población. Las cárceles atestadas de reclusos, muchos de ellos jóvenes con un gran número de adolescentes entre ellos, nos llevan a pensar en cómo sería distinto si la educación que está recibiendo la población respondiera a sus reales necesidades. Yendo más atrás aún, si todos los niños y jóvenes de nuestro país dispusieran de las oportunidades educativas que les permitieran el desarrollo de sus potencialidades desde la primera infancia. Practicando deportes desde pequeños, en talleres de danza y música de sus escuelas, actuando en los grupos de teatro o de folklore, participando en actividades comunitarias… Si lográramos recuperar una educación pública fortalecida, con un proyecto educativo de excelencia para todos nuestros jóvenes. Si en él estuviera contemplada la formación del alumno o alumna en todas sus dimensiones, como persona que forma parte de una comunidad, en el conocimiento de sus derechos y también de sus deberes como ciudadano, en el respeto hacia sí mismo y hacia los demás y todo ello se vivenciara en profundidad en el día a día de la escuela.

Si en el gran medio masivo de comunicación que es la televisión, imbuida del espíritu de servicio que la inspiró en sus comienzos se procurara educar en esos valores y además enseñara en temas como salud, psicología, historia, cuidado del medio ambiente, ciencias, todos como complemento de aquellos contenidos que forman parte del curriculum escolar, estarían dadas las bases para que nuestros jóvenes puedan llegar a ser parte de una sociedad justa e igualitaria.

Lo recién expuesto no es utopía, no es un sueño. Es cuestión de que cada uno de nosotros comprenda que en verdad en la educación pública reside la clave del Chile que queremos y que en consecuencia, dispongamos de la fuerza para exigir que se tomen las acciones que lleven a la consecución de ese gran objetivo. Corresponde a la necesidad urgente que tenemos de ser miembros de una nación donde exista justicia social, una nación que nos enorgullezca no por sus avances económicos solamente, sino también por ser forjadora de un grupo humano que tiene dignidad y respeto por su historia.

Ideas Al Sur del Maipo

200 HISTORIAS PARA 200 AÑOS

Rodrigo Salas,
Dibujante animador profesional y
realizador audiovisual.

Chile celebra 200 años de su independencia y a quienes forjaron a
pulso esta orgullosa nación. Por lo que se han hecho variados
documentales históricos relativos a los grandes personajes de la historia
republicana de Chile, pero que pasa con aquellos hombres comunes que
si bien no cambiaron radicalmente la historia de nuestro país, si al menos la
de nosotros y de los lugares que habitan o habitaron. Me refiero a nuestros
propios ancestros: bisabuelos, abuelos padres y familiares, que fueron y
son parte de esta historia. Ayudando a forjar la patria en sus campos
laborales y más aún de aquellos que llegaron a Chile escapando de los
horrores del mundo para vivir en este... el último lugar del mundo.
Estas historias que por el paso inexorable de los años se perderán en las
arenas del tiempo, dejará un vacío histórico y cultural que no podemos
permitir, pero es nuestro deber que esto no ocurra es para eso que
propongo lo siguiente
Que cada uno de los interesados investigue, a uno de sus familiares que
tenga un relato o una anécdota histórica en la que haya participado y que a
sido de relevancia para el país, comuna o familia , nos envíe aquella historia,
para que escojamos las mejores 200 historias y con ella realicemos mini
documentales de estas personas, cuyo aporte seria incalculable para las
futuras generaciones ya que seria un registro visual de aquellos años,
además que seria un excelente material educativo y patrimonial.
Pueden participar todos quienes crean que alguno de su familia merezca
ser recordado por algún evento digno de ser plasmado un mini documental.
Me gustaría que esta iniciativa se llevara a cabo, seria un material de un valor
incalculable para las futuras generaciones así como para nuestras propias
vidas.
Además podríamos financiarla a través de un Fondart u otro fondo
concursable, para que la calidad y factura sean de nivel profesional
Dejo planteada la idea en este foro Al Sur del Maipo

Ideas Al Sur del Maipo

Un Buen Modelo Para Tener en Cuenta

Elisabeth Anriquez Ebner
Psicóloga Universidad de Chile
Magíster en Educación PUC
Consultora en Gestión Escolar Fundación Chile

Habiendo sido invitada a una actividad en un colegio de la
comuna de San Joaquín, tuve la suerte de vivir una de esas
experiencias que pueden ser memorables para alguien
inmerso en el mundo de la educación chilena, según me
reconozco. Como no tenía claridad sobre el barrio y la forma de acceder pude estar
media hora antes observando desde la calle la llegada de los alumnos que en su
mayor parte venían caminando quizá desde sus casas. Me llamó la atención verlos
tan ordenados con hermosos buzos, bien peinados ellos y ellas, muchos de los
pequeños de la mano de sus abuelas, otros llegando en bicicleta con el papá, o a pié
con sus madres; al menos dos venían en furgones del trabajo de sus padres. En el hall
de acceso impecable, en un gran poster se leía: “Educando con Afectividad”, más allá
una pizarra mostraba los trabajos de escritura del primero básico, fotografías de
actividades del reciente aniversario con niños y profesores celebrando, padres
caracterizados en una obra de teatro. Mucha alegría.
Luego la recepción misma por parte del inspector y los directivos, amables y
acogedores, tanto conmigo como con los alumnos que se acercaban por distintas
razones.
En el curso del día tuve oportunidad de conversar en profundidad con diferentes
personas, hacer preguntas, escuchar largamente a alumnos, padres y profesores
acerca de su impresión sobre el colegio. Todos, sin excepción mostraron orgullo por
pertenecer a él: “nuestro colegio es el mejor del barrio”, “las tías nos ayudan cuando
no entendemos”, “aquí no hay bullying porque el año pasado trabajamos fuerte en
eso”, “fuimos los mejores en el Simce”, “somos como una familia”.
En la tarde observé una clase de danza como las mejores que he visto. En la sala de
computación, el responsable atendiendo solícito las consultas de algunos pequeñitos.
Y por último, ya finalizada la jornada, una profesora de 8º básico, entre severa y
afectuosa, exigiendo a algunos rezagados el cumplimiento de un trabajo que no
admitía postergación. En el 2009, este fue el colegio que ponderó el mejor puntaje
comunal; según su directora: “esto es el resultado de un buen trabajo en equipo, de
una cultura de altas expectativas”.
Y ahora, ¿qué tipo de institución escolar era esta? Pues bien, la escuela
municipalizada Ciudad de Frankfort en la comuna de San Joaquín.
Con los conocidos problemas de financiamiento que pesan sobre estas escuelas, la
llegada hace tres años de una directora alegre, tenaz y con una fuerte vocación
docente marcó la diferencia. Con la autonomía que se le entregó desde la Corporación
Municipal ella logró formar un equipo con profesores, padres y alumnos que funciona
con la convicción que juntos son capaces de lograr cualquier cosa que se propongan.
Y la verdad es que se nota. ¡Qué buen modelo a seguir!
¿Qué nos surge como reflexión final?: que la escuela que queremos para nuestro país
sí es posible cuando existen algunas de las condiciones como las que se vislumbran
en este relato. Aun cuando puede sonar a planteamiento ingenuo, para que ello ocurra
se trata sólo de que las autoridades responsables tengan la voluntad de gestionar las
acciones necesarias. Ni más ni menos.

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Foro: Ideas Al Sur del Maipo

Una experiencia necesaria y exitosa de Reciclaje

Juan Sebastián Witt
Profesor e Inspector
Colegio San Francisco de Paine

Quienes fuimos formados en el hábito de reducir la cantidad de basura que
generamos, reutilizando envases y materiales, así como procurando y fomentando el
reciclaje de desechos para elaborar nuevos productos, tenemos el deber de promover
este concepto en nuestro entorno inmediato y hacer lo necesario para asegurar su
éxito.
En nuestro hogar y el de nuestros amigos y familiares, entre nuestros vecinos y en
nuestros lugares de trabajo, podemos generar la conciencia que se requiere para
iniciar y sostener un proyecto que se traduzca, en un mediano plazo, en un estilo de
vida respetuoso de los pares y del medio ambiente.
Sin duda encontraremos en el camino los aliados y la energía que nos motivarán a
insistir en esta propuesta, cada vez más necesaria para todos.
Nadie es indiferente a las iniciativas de reciclaje, nadie que tenga donde depositar sus
“basuras” reciclables deja de hacerlo, pero lamentablemente los centros de acopio, por
lo general, no son todo lo amigables, cercanos y diligentes que la comunidad necesita
que sean, para hacer de este esfuerzo un hábito. Por esta razón, quienes creemos en
esto, como única e imperativa salida, debemos trabajar para que nadie tenga la
excusa para seguir mezclando plásticos, vidrio, tetra pak, papel, latas y cáscaras en la
misma bolsa de basura.
En Paine y Buin existen varios centros de reciclaje en los que compran envases de
vidrio, fierros, latas, papel y cartón. En las municipalidades de ambas comunas
compran la recolección de botellas plásticas de jugos y bebidas que se realiza en los
colegios. Conocemos los contenedores de CODEFF para vidrio y las cajas de
SOREPA para el reciclaje de papel en las oficinas. El tetra pak es un reconocido
aislante térmico en la construcción, y el compost preparado con desechos orgánicos
brinda increíbles beneficios a nuestros huertos y jardines. La cantidad de usos y
destinos prácticos que podemos darle a envases plásticos de yogurt y bebidas es
incontable, y así podríamos seguir enumerando elementos con sus posibilidades de
reutilización y reciclaje que todos deberíamos asumir como un impostergable deber en
beneficio de nuestros hijos.
En el marco del proyecto de Educación Ambiental del Colegio San Francisco de
Paine, se comenzó, a mediados del año 2009, a recibir botellas plásticas desechables,
sumándonos a la iniciativa impulsada por el departamento de aseo y ornato comunal
en los colegios municipales. El año 2010, junto a los alumnos del ciclo Preescolar se
implementó el huerto del colegio y comenzaron a compostarse todos los desechos
orgánicos del casino. Además, se establecieron vínculos con un centro de acopio de
desechos reciclables, que permitió ampliar la gama de envases y materiales que reúne
con este fin la comunidad franciscana. El dinero recaudado en el año será destinado a
financiar iniciativas del Centro de Alumnos vinculadas a este proyecto.

Ideas Al Sur del Maipo

Foro: Ideas Al Sur del Maipo

¿QUÉ ESPERAMOS DE LA EDUCACIÓN?

Ps Elisabeth Anríquez
Vicepresidente Corporacion Al Sur del maipo
Ex directora Colegio San Francisco de Paine

Con relación al gran tema que hoy está sobre la mesa y que es la reforma
educacional que está proponiendo el gobierno, quizá es importante hacer
algunas reflexiones previas
En este sentido observamos que el debate se ha centrado desde hace años en
cómo alcanzar mayor eficacia escolar para lo cual se miden las mejoras de los
puntajes de los alumnos en las distintas pruebas, se evalúa a profesores y
directores y se proponen incentivos por mejores resultados. Según esta lógica,
los estudiantes con mejores resultados tendrán mayores posibilidades de
acceder a una mejor educación, y mientras sea así sus ingresos serán
mayores.
¿Solamente eso es lo que queremos?
Pensamos que el debate debiera ir aún más allá preguntándonos por ejemplo:
La escuela de hoy ¿está educando a los niños y jóvenes para que sean
personas respetuosas, responsables, solidarias, interesadas en el bien
común? Sus egresados ¿se destacan por su pensamiento crítico, por la
comprensión de la situación de su país en el contexto mundial, por su
capacidad para argumentar?
Quizá estamos lejos de conseguir esto.
Esta gran tarea debiera sustentarse en una reflexión acerca de qué queremos
educar y para qué, de modo que en todos los actores involucrados el proceso
de educar contenga un profundo sentido de manera que sea vivido con la
trascendencia que en verdad posee. No es posible reducirla solo a puntajes y
cifras. Por lo tanto, a partir de estas consideraciones podemos afirmar que
hoy día más que nunca, surge como imperiosa necesidad el fortalecimiento de
las humanidades y las artes. Ellas nos ayudarían a pensar mejor en cuál es el
tipo de persona que la escuela debe formar o qué clase de ciudadano es el
que nuestra sociedad requiere.

Huelquén, 29 noviembre de 2010